CULTURATSUNAMI
Domingo en la mañana. Noticia de última hora. Desastre ecologico en Asia. CNN En Español no informa nada. Solo tiene un cartelito patetico. CNN Internacional lanza imagenes del mar y tiene analistas. Chilevisión en Alerta, al igual que el resto de los canales nacionales. Ni un muerto. Solo olas. Solo rumores. Solo titulos hechos en banderas digitales.
No pasa nada.
Al día siguiente siguen las noticias. Ahora hay mas muertos. Ahora hay numeros grandes. Ahora hay niños en hospitales. Ahora la gente llora. Hay chilenos que nadie encuentra. Hay sangrientos titulos en La Segunda. Hay una sensación ambiente de destrucción. Frases apocalipticas. Cientos de kilometros. El satelite acerca y todos nos sentimos apenados y asustados. Los de las playas pudimos ser nosotros. El mar se recoge y nos traga para siempre.
48 horas mas tarde 50.000 muertos, coberturas especiales, alertas de la cruz roja, Caos en la ciudad. Al regresar tendremos contactos telefonicos via satelite. Al volver sigue la tragedia.
Y la tele ahi, sumando imagen, quitando, editando, decidiendo, opinando, escupiendo, destruyendo, evitando, emocionando.
Y decidiendo nuestros temores, asumiendo nuestro consumo.
Y nosotros tras la pantalla espantados, con la impotencia de no hacer nada y perdiendo la religión.
No le creas a nadie. Ni siquiera a tus verdades. Por que pueden ser transformadas y sumadas a la gran base de datos que se desnuda a conciencia.
Piensa de que si ellos quieren, no te muestran nada. Las salas de prensa siempre saben mas que nosotros. Algo se nos esta escondiendo en vivo mientras nuestras miradas infertiles y temerosas se cruzan en el metro y el diario gratuito de la mañana sigue recogiendo cadaveres.
Y sigues pensando en la muerte como si la cultura Tsunami, a través del microondas, te rodeara a través de la luz que titila en tu impresora.
Hay veces que dudo si estamos en peligro. Tengo una nave espacial en mi patio apunto de despegar.
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