Nicolás Copano 24/7

QUEDAN2DIAS

El Martes es mi cumpleaños número 21.

En tanto, los dejo con un articulo de La Nación Domingo donde me nombran y entrevistan, acerca de los hombres beta. Click Aquí.

Y como siempre, la columna dominical. Abrazos.

UNCACHITODELUZ

Nicolás Copano para La Nación Domingo, 26 de Agosto de 2007

Me apena Nelson Mauricio Pacheco. Ese niño hombre que baila y grita con la histeria de una adolescente celebrando la llegada de su primera menstruación. Antes lo encontraba un payaso útil para cualquier tipo de chistes sobre la ambigüedad sexual enquistada en ese imperio Disney de los programas de mediodía, un mundo lleno de sexo sin sexo, insinuación permanente de un Sodoma y Gomorra con modelos que se ponen los cuernos y contraen hepatitis sin ninguna campaña sobre el uso del Condon. Una imitación de la vida de la dueña de casa que hace pastel de choclo mirando el reloj para que le den ese merecido que el marido posterga culpa del estrés provocado su sueldo etico, para un país africano, obviamente. Ahora el pobre aparece buscando públicamente que no lo saquen de pantalla, peleandose y estando dispuesto a ser descuartizado en ese gran tribunal de un país con una justicia ineficiente llamado Salvese Quien Pueda.

Nelson Mauri, igual que yo, similar a tantos otros jóvenes televisados en distintos sistemas y canales, han tenido la suerte – por que todos los caminos no llegan a buen puerto – de vivir este mundillo loco y sospechoso, lleno de egos, eventos sociales para no decir nada de nadie (por que aca piensan que criticar un programa va en la personal, y uno le quiere prender parafina al otro si dice lo que piensa) y gran cantidad de serviles personajes dispuestos a compartir todo tipo de sustancias prohibidas para volverse loco y poder estar cerca de ese cachito de luz que les donan nuestras estrellas de plumavit. Evidentemente los destinos no son lo mismo, y en lo personal ni siquiera me siento cerca de ese mundo, tome un camino medio dificil y absurdo: cuando se dio la oportunidad de despertarme a las 5.30 de la mañana para hacer un programa de radio lo tome, sin pensar que mi vida cerca de esas horas y mundos con olor a cigarro en el abrigo se iban por el despeñadero, pero ahora que observo a distancia, me siento ganando mi plata de forma mas valiosa, mas outsider, sin creer en nada mas que en que uno trabaja igual que las personas que miran, leen o escuchan. Nada de discoteques huevonas y pensar que uno la lleva cuando solo es un empleado. Eso mata el instinto de crear, por eso nuestros medios de comunicación estan metidos en un gran sandwich de formulas repetidas y poco riesgo. Demasiado sushi en la cabeza, mucha inauguración en el alma, poco contacto con la gente, tiendas que regalan personalidades, celebraciones de grandes fracasos trabajados como éxito y un conformismo permanente tienen a nuestros medios de comunicación hablandole a 5 personas. Ni siquiera los clientes objetivos estan contentos: los mas instruidos desarrollan sus propios blogs y espacios, y los que saben menos miran con asco todo este espectaculo del silencio en un Chile que valoricamente esta despedazado. Riendose con susto . Y no hablo de conservadurismos: si no de ese egoismo grotesco internado generacionalmente, o ¿diganme que este simpatico jueguito de las pelolais ABC1 y la respuesta pokemona Ondulais, no es una nueva expresión de clasismo new generation?

Pobre Nelson Mauri y ese mundo de la fama, la sensacion vertigo permanente de los contratos y las cámaras y todas las mentiras del mundo desnudadas cuando en la soledad mas absoluta tienes miedo de que te traicionen todos. Ese sinonimo de una seducción permanente de convertirse en un pelmazo irrespuetuoso, creyendo que la hiciste toda, como tanto mediocre con vidrio polarizado y gran camioneta que da vueltas por ahí, solo sirve para rellenar paginas de revistas tontas de fotos grandes para gente que no sabe leer. El camino es trabajar. Y cresta que falta para que varios se pongan las pilas. LND